En la primera jornada, los miembros del FORO (Argentina, Brasil, Chile, Cuba, España, México, Perú y Uruguay) plantearon la posibilidad de su ampliación con nuevos países iberoamericanos. Además, los representes de cada uno de los ocho países barajaron la posibilidad de dotar de una nueva personalidad jurídica a la organización (en función del informe del grupo de asesores legales del FORO) y de estrechar lazos con el sistema de cumbres de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), con la Organización Mundial de la Salud (OMS), con la Organización Panamericana de Salud (OPS) y con el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).

Así, a esta reunión del plenario asistieron también dos representantes de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (OIEA), Denis Flory (Director General Adjunto de Seguridad Nuclear) y Paul Woodhouse (Coordinador de Programas Extrapresupuestarios), con el objetivo de exponer y profundizar en las líneas de trabajo de interés mutuo para ambas instituciones.

En cuanto a las actividades de la organización, el director del Comité Técnico del Foro, Alfredo de los Reyes, y la coordinadora del Secretariado, Sonia Fernández Moreno, presentaron los trabajos en ejecución, las nuevas propuestas de proyectos y el estado actual de los presupuestos de la institución.

En la sesión de hoy los representantes de cada país han presentado un resumen de sus principales actividades desarrolladas durante el último año, centradas en tres líneas de trabajo: el licenciamiento y la actividad reguladora, los retos que han aparecido desde la última reunión y, por último, las acciones realizadas por cada país tras el accidente de Fukushima. El objetivo de esta sesión es conocer e intercambiar las mejores prácticas llevadas a cabo por los organismos reguladores iberoamericanos.

Finalmente, mañana está previsto que la presidenta del organismo regulador cubano, Aniuska Betancourt, traspase a España la presidencia del FORO (que tiene carácter rotativo anual).

Para concluir la reunión, el vicepresidente Colino distribuyó entre todos los representantes un libro conmemorativo del XV aniversario del Foro Iberoamericano, elaborado con contribuciones de todos los países miembros de esta institución y de varias organizaciones internacionales, dando cuenta del trabajo realizado desde su fundación en 1997.