De acuerdo con los procedimientos establecidos, una vez compilados los datos e informado el Pleno del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), se han publicado en la página web institucional los resultados del Sistema Integrado de Supervisión de Centrales (SISC) correspondientes al tercer trimestre de 2018. Éstos, el histórico y los detalles sobre el funcionamiento del SISC pueden ser consultados en el siguiente enlace.

El SISC tiene como objetivo la optimización y sistematización de la supervisión de las centrales nucleares, mediante el uso de una metodología integral que permite concentrar los esfuerzos en las áreas de mayor riesgo potencial, incrementar la transparencia del proceso de supervisión y dar respuesta a los objetivos estratégicos del CSN. 

Entre julio  y septiembre  de 2018 se realizaron 29 inspecciones y se categorizaron 23 hallazgos de inspección, todos ellos considerados de “muy baja importancia para la seguridad” (clasificados con el color verde). 

Todos los indicadores de funcionamiento durante este tercer trimestre se han situado en la banda verde.

El SISC analiza y clasifica la información de los indicadores de funcionamiento de las centrales y de los hallazgos de la inspección obtenidos, que se traduce en un código de colores que gradúa el riesgo y la importancia para la seguridad, el cual va desde el color verde, de baja importancia para la seguridad, seguido por el color blanco, correspondiente entre baja y moderada importancia, al que sigue como de importancia sustancial, el color amarillo, y situándose en el nivel de importancia alta el color rojo. 

Finalmente, los resultados se integran en una “matriz de acción”, que establece las acciones a realizar por los titulares y el CSN, en función de la relevancia de los resultados de la supervisión, proporcionando una visión global sobre la situación de cada una de las centrales. 
La matriz consta de cinco columnas en función de los resultados obtenidos, que de menor a mayor supervisión por parte del CSN, se corresponden con las columnas de respuesta del titular, respuesta reguladora, pilar degradado, múltiples/repetitivas degradaciones, y funcionamiento inaceptable. Según la posición en la matriz de acción, se llevan a cabo acciones correctoras y, en su caso, actuaciones reguladoras para corregir la situación.

Una vez evaluados los resultados y unidos al historial reciente de cada instalación, durante este tercer trimestre todas las centrales nucleares en operación se encuentran situadas en la columna de “respuesta del titular” de la matriz de acción, excepto Ascó II, que está en la columna de “respuesta reguladora”, debido a que durante el segundo trimestre se categorizó de forma definitiva un hallazgo blanco relacionado con la instalación en un generador diésel de un componente con vida útil superada, sin haber realizado un análisis de su viabilidad.