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2022
El CSN destaca el adecuado cumplimiento de los programas de vigilancia radiológica ambiental llevados a cabo en 2020
El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha publicado el vigesimotercer informe anual de los resultados de los programas de vigilancia radiológica ambiental desarrollados durante 2020, acompañados de los datos históricos que constituyen un marco de referencia.
Los objetivos básicos de esta vigilancia son detectar la presencia y supervisar la evolución de los elementos radiactivos y de los niveles de radiación en el medio ambiente, y determinar las causas de los posibles incrementos; estimar el riesgo radiológico potencial para la población, así como determinar, en su caso, la necesidad de tomar precauciones o de establecer alguna medida correctora.
Con este documento, que forma parte de su colección de “Informes Técnicos”, el organismo regulador pone a disposición de ciudadanos e instituciones la información referente a los niveles de radiactividad ambiental del país con un cierto nivel de detalle.
La evaluación del impacto radiológico ambiental de las instalaciones nucleares y radiactivas, así como la calidad radiológica del medio ambiente de todo el territorio nacional, se lleva a cabo mediante un sistema de redes, constituido por una red de vigilancia en el entorno de las instalaciones y por una red nacional. A este respecto, el informe describe brevemente las principales características de dichas redes y programas de vigilancia, así como los resultados obtenidos ese año.
Asimismo, presenta la proyección temporal de los valores radiológicos más representativos de los últimos 10 o 20 años, según sea para las instalaciones del ciclo de combustible en operación o para las centrales nucleares, respectivamente. El documento también incluye un anexo con la actividad emitida a través de los efluentes de las centrales nucleares y de las instalaciones del ciclo del combustible durante 2020.
En cuanto al proceso de ejecución de este programa de vigilancia, el organismo regulador ha puesto de manifiesto el adecuado cumplimiento y el reducido impacto generado por la pandemia del COVID-19. Los programas de vigilancia en el entorno de las instalaciones se llevaron a cabo prácticamente en su totalidad y en el caso de la vigilancia nacional se produjeron algunos retrasos o pérdida de la recogida de alguna de las muestras que afectaron a un porcentaje menor del 10% del programa previsto para 2020.
Aplicación web Keeper de datos de vigilancia radiológica ambiental